Hola, soy Andrea tengo 23 años y ahora mismo estoy huyendo, tengo miedo de que me encuentren y me encierren para siempre, no estoy loca, no pude haberlos matado.
*Toc toc*
-¿Sí? ¿Quién es?
-Buenos días, con la señorita Beizaga?
-sí, habla ella, ¿qué desea?
-Soy el agente Oxford, estoy haciendo investigaciones con respecto al caso de su mejor amiga.
Voy y le abro la puerta, me hacen preguntas típicas a lo que les respondo con frases cortantes y evasivas, mi mejor amiga falleció hace algunos días, su muerte fue misteriosa ya que apareció muerta en su departamento, amordazada y con las piernas mutiladas, me dolió mucho haberme enterado de esa noticia, quiero saber quién es el autor de tan espantoso crimen, así que trato de pensar en los posibles sospechosos, la policía hace su trabajo, pero no es suficiente.
Así transcurren los meses hasta que mi novio aparece muerto en su departamento, en el mismo estado de mi mejor amiga, faltaban 3 meses para casarnos, me siento fatal, quiero dejar de vivir, él para mí era todo.
Días después me veo desde otro plano, no sé si es un sueño, quiero creer que es así.
Soy yo caminando por la habitación de mi mejor amiga, esperando a que ella regrese del trabajo, hasta que lo hace, de inmediato me escondo en uno de los armarios y la sigo sigilosamente para que no se dé cuenta.
La agarro por la espalda y la asfixio, luego la llevo a su habitación y la empiezo a desnudar; efectivamente tiene unas lindas piernas, lástima que se las entregó al hombre equivocado, así que con un cuchillo enorme de cocina voy desmembrando sus extremidades inferiores, tomo los trozos y empiezo a envolverlos en unas bolsas para después alimentar a los perros de la calle.
Hasta que de pronto despierto de ese sueño, estoy de lo más tranquila en mi cama, no recuerdo que fue lo que pasó después, así que solo me visto para ir al trabajo.
Todo transcurre con rapidez, hasta que pasa lo de mi novio, otra vez el mismo proceso: vienen los policías, les digo lo mismo y bla bla bla, se van en vista de que no obtendrán más pistas.
De nuevo me veo desde otra perspectiva, mas bien diría yo que es un recuerdo...
El día que anuncié mi boda, mi mejor amiga intentó persuadirme para que no lo hiciera insinuando que estaba joven y que aún me faltaba mucho por vivir y experimentar, y que según ella mi novio no era el indicado, me enojé con ella porque se supone que debería apoyarme en las decisiones que me hacen sentir feliz.
Su comportamiento cambió, nunca estaba de acuerdo cuando le pedía su opinión, un día me tocó ir de viaje para arreglar asuntos laborales y se supone que tenía que regresar dentro de una semana es decir un día viernes, pero terminé de solucionar esos asuntos deprisa, así que quise darle una sorpresa a mi novio llegando antes de lo previsto, el día miércoles entré a su departamento de sorpresa y escuché gemidos, fui averiguar quién era y me di con la sorpresa de que era mi mejor amiga, él le decía:
– "Qué sexys piernas tienes, nada comparado a las de Andrea, si no fuera porque es millonaria, jamás hubiera aceptado estar con ella", a lo que mi mejor amiga respondía:
–"Me encanta que me digas esas cosas, Andrea jamás se enterará de que tú y yo ya nos conocíamos mucho antes de que tú la conocieras y la enamoraras".
Quise encararlos pero me detuve, necesitaba saber toda la verdad seguía escuchándolo:
– "Una vez que Andrea sea mi esposa, contrataré a un asesino para que la mate en nuestra luna de miel y todos crean que fue un accidente, así podré quedarme con toda su fortuna y darte la vida que mereces bebé..."
Me entró mucha rabia y solo salí con la idea de vengarme, así que planifique su muerte.
Despierto de ese trance y me doy cuenta de que la persona que asesinó a mi mejor amiga y a mi novio fui yo, pero no recuerdo haberlo hecho, trato de convencerme de que no es así, pero ya es muy tarde, la policía está fuera.
Salgo por la puerta trasera y los policías se dan cuenta, sigo corriendo hasta que mi mente se pone en blanco, y me desmayo, despierto en un lugar desconocido, pero lo peor de todo es que estoy amarrada y amordazada en la cama, me doy cuenta de que es un hospital, una enfermera seguida de una doctora vienen y la doctora le dice "inyéctala" a lo que la enfermera obedece, poco a poco me voy balanceando en los brazos de Morfeo, no sin antes escuchar decir a la doctora:
– Andrea Beizaga 23 años, transtorno bipolar y de múltiple personalidad, debemos internarla inmediatamente en el hospital psiquiátrico.
Nadie se ha dado cuenta que amar a la persona equivocada te pone al filo de la navaja...
